Las vacunas son una parte fundamental del cuidado de la salud de nuestros hijos. Protegen contra enfermedades graves y salvan millones de vidas cada año. Sin embargo, es normal que como papás tengamos dudas o temores antes de la cita. Aquí te compartimos algunas recomendaciones para que ese día sea más tranquilo tanto para ti como para tu hijo.
Antes de la vacuna
- Habla con tu hijo con honestidad: Si tu hijo ya entiende, explícale que van a ponerle una vacuna para proteger su salud. No le digas que no va a doler; es mejor decirle que puede doler un poco, pero que será rápido y tú estarás a su lado.
- Lleva algo que le dé confort: Un objeto familiar, como su cobija, peluche o incluso tu propio abrazo, puede ayudar a calmarlo.
- Vístelo con ropa cómoda: Facilita el acceso al brazo o muslo donde se aplicará la vacuna.
- Lleva su carné de vacunación actualizado.
- Si estás amamantando, amamántalo durante la aplicación: Si el centro de vacunación lo permite, dar leche mientras vacunan puede disminuir el dolor y el llanto, gracias al contacto piel con piel y el efecto analgésico natural de la lactancia.
- No dar medicamentos antes de la vacuna: Evita dar acetaminofén (paracetamol) o ibuprofeno antes de la aplicación, salvo que el pediatra lo indique. Algunos estudios sugieren que estos medicamentos pueden disminuir ligeramente la respuesta inmunológica, es decir, la capacidad del cuerpo de generar defensas (anticuerpos) que nos protegen contra las enfermedades.
- Asegúrate de que el niño esté saludable: Si presenta fiebre o algún cuadro agudo de enfermedad, consulta con el pediatra o escribe a Docokids, donde un pediatra puede orientarte si es necesario posponer la vacuna.
Después de la vacuna
Es común que algunos niños presenten efectos secundarios leves, que son señales normales de que el cuerpo está generando defensas:
- Irritabilidad.
- Somnolencia (sueño o estar más adormilado de lo habitual).
- Dolor o enrojecimiento en el sitio de la inyección.
- Fiebre leve.
Ten a mano:
- Acetaminofén (paracetamol): Para cualquier edad (siguiendo siempre la dosis recomendada).
- Ibuprofeno: Si tiene más de 6 meses, puedes tenerlo disponible si el pediatra lo autoriza.
Recuerda que no es necesario dar medicamentos preventivamente. Solo dáselos si presenta fiebre, dolor o malestar.
¿Cuándo consultar al médico?
Aunque la mayoría de los efectos son leves, hay algunos signos de alarma que requieren valoración:
- Fiebre mayor a 39°C que no cede.
- Llanto inconsolable por más de 3 horas.
- Hinchazón importante o enrojecimiento que aumenta.
- Somnolencia excesiva: Si el niño está tan adormilado que cuesta despertarlo o parece no responder normalmente.
- Dificultad para respirar, ronquera o hinchazón de labios (posibles signos de alergia).
En estos casos, consulta al pediatra o escribe a Docokids. Con nuestra membresía, un pediatra está disponible 24/7 vía WhatsApp para orientarte y darte tranquilidad en cualquier momento.
Escrito por: Natalia Cano